Reducción de las emisiones de carbono: 1 camión, 1 comunidad a la vez

Maxiloda reduce las emisiones de carbono

Pisa con cuidado, lleva más.

Maxiloda surgió de un problema de los clientes. Cómo maximizar el movimiento de mercancías sin tener que poner más camiones en la carretera. Reducir los residuos en todas sus formas. Nuestra visión en Maxiloda es pisar ligeramente el planeta para protegerlo para el futuro, un camión, una comunidad a la vez. Nuestros sistemas de paletas de doble apilado para camiones y remolques son una solución de transporte innovadora que permite a nuestros clientes mover más con menos.

La actual dependencia de los combustibles fósiles para propulsar vehículos, aviones, trenes y barcos, unida a la creciente demanda de mercancías, sitúa al sector del transporte en primera línea de los esfuerzos por reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y frenar el cambio climático. En 2018, el transporte de mercancías y pasajeros representó el 28% del total de las emisiones de gases de efecto invernadero en EE.UU., es decir, 1.870 millones de toneladas de CO2 equivalente, afirma la Agencia de Protección Ambiental. Un camión tiene la misma huella de carbono que 14 personas en un año, es decir, 220 toneladas de emisiones de dióxido de carbono.

Las cifras son enormes, la tarea es abrumadora y es necesario actuar con urgencia. El cambio a combustibles alternativos, el aprovechamiento de la automatización y la adopción de prácticas más eficientes son temas comunes en todo el sector del transporte para provocar una reducción de las emisiones. Pero no es un camino sencillo, ya que las soluciones sostenibles no siempre están disponibles en el transporte de mercancías. Varias empresas mundiales, como Deutsche Post DHL Group, tienen el objetivo de conseguir cero emisiones netas para 2050 en toda su flota invirtiendo en tecnologías verdes. Los gobiernos están promulgando leyes para reducir las emisiones, como la de California, que exige que la venta de todos los vehículos medianos y pesados sea nula para 2045. La normativa de la UE exige una reducción del 15% de las emisiones de los camiones grandes para 2025, y del 30% a partir de 2030.

La pandemia de Covid-19 tuvo un efecto tanto positivo como negativo en las emisiones de CO2. En 2020 se produjo una reducción del 7% como resultado de la disminución de coches y camiones en la carretera durante los cierres en todo el mundo. Ya estamos viendo cómo esta reducción de las emisiones de CO2 se invierte a medida que las economías mundiales se aceleran y presionan para que las vacunas se distribuyan entre la población.

El paso a la electrificación y a los combustibles alternativos es crucial para que el sector del transporte por carretera llegue a ser neto cero. Estas alternativas sostenibles están reduciendo su precio y aumentando su rendimiento, y junto con las normativas gubernamentales y los objetivos de las empresas tendrán un impacto positivo en las emisiones de CO2 en los próximos años. Sin embargo, todavía hay una enorme flota mundial de camiones alimentados con combustibles fósiles en la carretera que no se retirará hasta dentro de un tiempo, ¿cómo podemos mejorar la sostenibilidad de una flota existente y reducir su impacto en el medio ambiente?

Las empresas de transporte y los conductores pueden hacer más eficiente su flota actual y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. 

  1. Mantenimiento regular: mayor eficiencia del combustible y mayor seguridad en la carretera

  2. Deje de funcionar al ralentí: un camión al ralentí puede consumir 1 galón de combustible por hora, según la American Trucking Association. Reducir el tiempo de ralentí supondría un importante ahorro de combustible y sería más respetuoso con el medio ambiente.

  3. Optimizar las rutas: las flotas pueden ahorrar combustible y aumentar la productividad eligiendo las rutas más cortas y convenientes. Los rastreadores GPS pueden ser realmente beneficiosos para localizar y elegir a los conductores cerca de un determinado punto de entrega, realizar recojos eficientes, etc.

  4. Eliminar el falso flete: los camiones vacíos no sólo no generan ingresos, sino que generan costes de transporte y contribuyen a las emisiones de gases de efecto invernadero. Reducir el falso flete tendrá un impacto significativo en la mejora de la rentabilidad y la sostenibilidad de una flota.

La reducción de los kilómetros vacíos e infrautilizados beneficiará al medio ambiente y, de hecho, podría generar ingresos adicionales. Colaborar con otras empresas para identificar oportunidades de carga, es decir, llenar el camión vacío en la ruta de vuelta. 

Consolidación o reparto de cargas a lo largo de la cadena de suministro, en la que se colabora con otras empresas para consolidar cargas parciales, aumentando así la carga útil, lo que se traduce en una reducción de los costes de transporte y un menor número de camiones en la carretera. 

Optimizar la carga por unidad es fundamental para reducir el falso flete. Maximizar la carga de un solo camión en lugar de dos camiones parcialmente llenos tendrá un impacto significativo en los costes de transporte y en el medio ambiente. Considere que la mayoría de las carretas transportan pallets, y que un porcentaje considerable de ellas sólo están parcialmente cargadas y llevan una sola capa de pallets. ¿Por qué? Los artículos son frágiles y es probable que se dañen con otro pallet apilado encima; un camión es para productos refrigerados y otro para productos a temperatura ambiente; no hay un muelle para meter una carretilla elevadora en el camión para hacer un doble apilado. 

Los sistemas de paletas de doble apilado de Maxiloda le permiten aumentar su carga sin poner más camiones en la carretera. El innovador sistema de carro rodante de Maxiloda Glide permite cargar con un montacargas desde el nivel del suelo, eliminando la necesidad de un muelle de carga. El segundo nivel de palets se mantiene en su sitio de forma segura, garantizando que no se dañe el producto, y el sistema puede configurarse para transportar cargas mixtas de productos a temperatura ambiente, refrigerados y congelados.

La sostenibilidad está en el corazón de Maxiloda. Escuchamos a nuestros clientes, a sus comunidades y al medio ambiente para impulsar nuestra innovación.

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